Sorprendí a mi madrastra rusa masturbándose y viendo porno. Quise disculparla, pero ella insistió en que me quedara y la ayudara a correrse. Pensé que estaba bromeando, así que imagínense mi sorpresa cuando empezó a chuparme la polla. Después de que me la chupó, no tuve más remedio que follar su coño afeitado a lo perrito.
Tienes que iniciar sesión para dejar comentarios en el muro. Por favor Iniciar sesión o Regístrate (gratis).